domingo, 4 de abril de 2010

Montoncito.

...no por quien eres, sino por quien soy cuando estoy contigo.

Hay mucho de verdad en esto y no sólo porque Gabriel García Márquez lo dijese en su día.
Alguna vez me he preguntado que es lo que hace que alguien deje de estar en el montón y pase a estar en tu montoncito.
No suelo encontrar una respuesta, aunque si indicios. Indicios como lo bien que le sienta a una estar a su lado o lo que sale de mi cuando estoy con este alguien, no hablo de cosas extraordinarias, hablo de bienestar, de sentirse a gusto con la otra persona y sobre todo con una misma.
Lo curioso, es que cada una de las personas de nuestro montoncito despierta en nosotros sensaciones distintas. A través de cada una de ellas descubrimos lugares de nuestro interior que hasta ese momento ni sabíamos que teníamos o que, si lo sabíamos, nos costaba llegar a ellos.
Viene a ser algo así como que cada persona del montoncito tiene una llave que, curiosamente, sabe como utilizar para llegar a esos lugares que no se ven a simple vista, pero que suelen valer la pena.
Hay quien lleva el tiempo suficiente como para necesitar un llavero, y yo espero que estos llaveros sean de los que no es fácil ir perdiendo las llaves.
Supongo que siguen quedando muchos rincones con cerradura, también supongo que tendrá que ver con el hecho de que quede mucho por andar.

En fin, yo creo que es aquí donde está la magia, en quien soy yo, cuando estás tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario